Cómo mejorar las conversiones de una web
En ocasiones el tiempo e ilusión que empleamos en el diseño y desarrollo de una página web nos hacen olvidar el objetivo final.
Nos sentimos satisfechos cuando vemos los resultados de tanto trabajo y comprobamos que todo ha salido como esperábamos. Pero no debemos olvidar que el objetivo final de una página web es convertir a sus visitantes en clientes satisfechos, para asegurarnos de que esto sucede el diseño de la web debe estar claramente orientado a las conversiones.
Son muchos los factores que influyen en el comportamiento que los usuarios tienen cuando visitan nuestra página, pero algunos resultan prácticamente imprescindibles para conseguir buenos resultados. La mejor forma de asegurar buenos resultados y la posibilidad de barajar las opciones más interesantes de forma seria y profesional es con la colaboración de profesionales expertos en el desarrollo web, olvídate de aficionados.
Velocidad de carga
Para que la experiencia de usuario sea buena, el primer factor a tener en cuenta es la velocidad de carga. Es importante que todas las páginas, no solo la principal, se carguen de forma rápida ya que un usuario puede cancelar un proceso de compra si la página de pedido o de pago tarda demasiado en cargarse.
Cuanto más rápido pueda navegarse por la web, más aumentarán las probabilidades de conversión de un usuario.
Arquitectura de contenidos
Una vez que tengas preparado el contenido que quieres mostrar en tu web, dedica tiempo a organizarlo. Planifica bien los apartados y categorías en que quieres mostrar cada pieza de contenido y crea una organización jerárquica bien definida. Esta organización debe facilitar en todo momento la navegación del usuario dentro de tu web.
Si crees que algunos contenidos pueden relacionarse con información perteneciente a otra categoría, puedes crear menús transversales entre distintas categorías o utilizar enlaces internos para relacionarlas.
Diseño
El diseño es muy importante porque supone la primera percepción que un usuario tiene de una página web. La primera impresión es lo que cuenta y debemos cuidarla para transmitir confianza.
Está comprobado que cuando a un usuario le gusta una web, puede navegar fácilmente por ella y comprende bien todos los mensajes que recibe, está más predispuesto a realizar una compra.
En el diseño son muy importantes las imágenes. La presentación de nuestros productos de forma clara y efectiva junto con imágenes de personas reales que ayuden a ganar confianza en el usuario es una de las mejores estrategias de marketing que se pueden utilizar en el desarrollo de una web.
Adaptación
La capacidad de una Web para adaptarse a cualquier dispositivo desde el que se acceda a ella es un aspecto del diseño muy importante a la hora de mejorar las conversiones. Crear un diseño web responsive que permita obtener una buena experiencia de usuario, independientemente de las circunstancias, es imprescindible para mejorar nuestro ratio de conversión.
Si un usuario no puede acceder bien a la información de una web cuando la visita desde un dispositivo móvil no solo la abandonará pronto, si no que no volverá a visitarla desde ningún otro dispositivo.
Interactividad
Permite que los usuarios interactúen con la página web. Los elementos dinámicos son cada vez más importantes para el usuario, que quiere algo más que leer contenido.
Los vídeos, comentarios, botones para compartir en las redes sociales y foros de discusión son algunos de los elementos dinámicos más atractivos para los usuarios de una web.
Confianza
Como ya hemos apuntado anteriormente, ganar la confianza de los usuarios es muy importante. Incluir comentarios de clientes satisfechos, ejemplos de objetivos cumplidos, premios recibidos y cualquier otra información que avale la calidad de nuestros servicios ayudará a que los usuarios nos conozcan.
En definitiva, un sitio web debe ser atractivo, sencillo y útil para conseguir un buen ratio de conversión. Cuanto más limpio sea un diseño más fácil resultará navegar por el contenido y mejor experiencia de usuario ofrecerá.